Es común encontrarnos con anuncios de empresas que prometen otorgar un préstamo con todas las facilidades posibles y las cuales afirman no consultar el Buró de Crédito para otorgarlo, lo que para muchas personas puede ser atractivo, pues su historial crediticio puede develar alguna situación de impago.
Pero esta promesa, en caso de optar por ella, puede convertirse en la peor pesadilla para muchos, pues en ocasiones estas empresas que prometen créditos con todas las facilidades del mundo, pueden resultar en estafas e incluso dañar a los sectores más vulnerables de la población, como las personas de la tercera edad.
Más adelante explicaré el tema de las estafas, no sin antes detallar el contexto que rodea a esta situación.
Colocación de créditos con personas de la tercera edad
Como se sabe, el ecosistema financiero ofrece una variedad de productos para distintos segmentos que van de acuerdo a la edad de una persona, situación laboral, región, actividad, en fin. Son tantos los factores a tomar en cuenta para poder acceder a un producto financiero que se adecúe a nuestras necesidades.
En este contexto, es obvio que hay empresas formales que se especializan en otorgar créditos para personas jubiladas y pensionadas, especialmente para extrabajadores de empresas del Estado, como el IMSS, ISSSTE, Pemex, CFE, entre otras.
Estas empresas, que por lo regular son bancos y sofomes, suelen ofrecer facilidades a estas personas para otorgarles un préstamo e incluso, el monto que reciben de su pensión puede servir como un aliciente para dar dicho crédito, pues parte de lo que recibe una persona se descontaría para pagar en automático dicho financiamiento.
Existen algunas empresas que otorgan créditos a jubilados y pensionados que van desde los 2,000 hasta los 200,000 pesos, en un esquema similar a los financiamientos vía nómina, donde la cantidad que recibe el trabajador como sueldo, en este caso, pensión, sirve como garantía para liquidar el crédito.
Es por ello que las empresas financieras formales que ofrecen esta clase de créditos suelen decir en su publicidad que no consultan Buró de Crédito; sin embargo, toman otros factores para decidir si otorgan el crédito o no a una persona de la tercera edad, como salud, años de vida, empresa con la que se pensionó, entre otros.
¿El crédito puede ser un fraude?
Ya explicado esto, pasaré a detallar el otro lado de la moneda: los fraudes. Voy a poner un ejemplo para dimensionar el tamaño del problema tan sólo en Estados Unidos.
Según el Consejo Nacional sobre el Envejecimiento en aquel país. el monto anual que se roba a personas de la tercera edad , vía estafas, equivale a 36,500 millones de dólares, como lo detalla la Comisión de Valores de los Estados Unidos (sec.gov).
En México, todavía no tenemos un censo sobre el tamaño de la afectación, pero lo que sí se ha detectado son los mecanismos por los que se estafa a la población, especialmente a la de la tercera edad.
Identifica a los fraudes financieros
Por lo regular las empresas defraudadoras se presentan ante las personas como una organización 100% formal. Sus instalaciones pueden aparentar legalidad, pero en el fondo sólo buscan quitar el dinero de sus víctimas.
Una vez que tienes contacto con ellas, te explican las facilidades que ofrecen si los eliges conseguir un crédito, que si bien no se presentan como entidades financieras, lo hacen como gestoras del crédito, es decir que son los intermediarios para poder conseguir el préstamo de una institución financiera formal.
Ya que aceptas la propuesta, de inmediato te piden una cantidad, ya sea en efectivo o que se deposites a una cuenta bancaria, con motivo de una garantía para apartar el préstamo o por trámites que se tienen que hacer para obtener la cantidad deseada.
Al final, la persona víctima entrega una cantidad sin que obtenga el préstamo deseado y la empresa defraudadora alega un sinfín de pretextos para no devolver lo que se le entregó ni dar el crédito. Situación que podría dejar un terrible endeudamiento a la persona.
Recomendaciones para no caer en fraudes
A continuación, una serie de recomendaciones de la Comisión Nacional para la Protección y Defensa de los Usuarios de Servicios Financieros (condusef.gob.mx) para no caer en esta trampa:
- En caso de requerir financiamiento, debes cerciorarte de la identidad y registro de la empresa o institución ante Condusef. Es mucho más seguro acudir con instituciones debidamente autorizadas.
- No te dejes engañar por la aparente rapidez para el otorgamiento del crédito.
- No entregues documentos personales o datos de tarjetas de crédito o débito, si no estás seguro de que sea una empresa seria.
Antes de dar la comisión por gastos de gestoría, asegúrate de la viabilidad del crédito.