En el mundo de las finanzas existen una gran variedad de productos en los cuales se ofrece capital o bienes, a cambio de que el deudor cumpla con sus obligaciones de devolver o pagar en un cierto plazo, con intereses y cuotas. A continuación, te platicaremos todos los tipos de deudas que existen.
Pero antes de entrar en detalles, es importante que repasemos algunos conceptos básicos para entender mejor los diferentes tipos de deudas, ya que en ocasiones las solemos confundir, sin embargo; la forma en que están estructuradas es totalmente diferente y van acorde a las necesidades de las personas.
¿Qué es una deuda?
El concepto de deuda es tan antiguo que data de algunos cuantos miles de años antes de Cristo, el cual consiste en un compromiso entre dos personas. En dicho trato, una persona presta algo, generalmente es dinero, y la otra se compromete a pagarlo íntegramente, incluyendo los intereses, con cuotas determinadas y en el plazo acordado.
Te recomendamos: Préstamos para liquidar deudas
Tipos de deudas: dos grupos
Las deudas también llegan a clasificarse en dos distintos grupos; las garantizadas y no garantizadas, se dividen de esta forma a raíz de su forma de pago y los acuerdos que son utilizados en estas, para entenderlo mejor aquí te lo explicamos:
Garantizadas
También se les conoce como “secured” o deudas con garantía y son aquellas donde el bien o propiedad consiguen utilizarse como forma de pago en caso de atraso. Dicho de otro modo, las propiedades que adquiriste garantizan al acreedor el pago de la deuda existente y él logre recuperarlas si no cumples con lo establecido en el contrato.
No garantizadas
Contrario al escenario anterior, este tipo de deudas no poseen aval, en otros términos, de no pagar o cancelar, el acreedor no podrá embargar ninguna propiedad. Sin embargo, el deudor sí llega a ser penalizado y de ser el caso se toman acciones legales contra éste, sin que sea despojado de sus bienes tomándolo como garantía.
Tipos de deudas bancarias
De este modo existen muchos tipos de deudas bancarias, que son las que adquieres con alguna institución financiera, las cuales te enlistamos a continuación:
Crédito personal
Este tipo de deuda consiste en que la entidad financiera otorga una cierta cantidad de dinero sin un fin específico, esto quiere decir que se logra gastar en lo que uno requiera, sin la necesidad de dar alguna explicación a diferencia de otros, comprometiéndose a devolver todo el capital más los intereses acordados.
Crédito de nómina
Las deudas vía nómina son muy comunes y al igual que los créditos personales se consigue usar el capital en lo que uno prefiera; sin embargo, el banco descontará el pago periódico directamente de tu nómina, como requisito no es necesario dejar a cambio alguna garantía o presentar avales.
Crédito empresarial
En términos generales es un préstamo que concede el banco exclusivamente a empresas, para lo cual deberás dar detalles sobre los planes de tu compañía y dar alguna garantía. Este dinero usualmente es destinado a la creación de proyectos o con el fin de que la entidad alcance sus metas u objetivos, que claramente contribuyen al crecimiento de esta y obtener más rendimientos.
Crédito hipotecario
La estructura de estos tipos de deudas si tienen un uso específico y es importante comprobar que fue usado con ese fin, el crédito hipotecario es un préstamo que te hace un banco exclusivamente para la compra de una casa, un terreno, un departamento o hasta para la construcción de un inmueble.
Crédito automotriz
Es un financiamiento que sólo se usa para la adquisición de un automóvil, la institución bancaria se encarga de entregar la cantidad de dinero necesaria, aunque para acceder a este estilo de créditos se requiere dar un enganche que funge como pago inicial y en cuanto más alto sea este, los pagos serán menores.
Tarjetas de crédito
Finalmente, las tarjetas de crédito, uno de los productos financieros más conocidos y usados, es un financiamiento revolvente, esto es un préstamo temporal, en cuanto lo pagues de manera inmediata lo puedes utilizar nuevamente, además si eres buen pagador con el tiempo se otorga una mayor línea de dinero.
¿Qué es la deuda de apalancamiento?
Técnicamente, una deuda de apalancamiento financiero consiste en utilizar algún mecanismo (como deuda) para aumentar la cantidad de dinero que podemos destinar a una inversión con el objetivo de incrementar las ganancias.
Es decir, este concepto se refiere a “apalancarse en algo”, lo que significa “apoyarse en una palanca”, que, en el contexto financiero, es buscar la palanca en la deuda. Al hablar de apalancamiento en la vida cotidiana de una persona, es que se está apoyando en una deuda para subsistir o crear más ingresos.
De esta forma, el apalancamiento financiero es un indicador del nivel de endeudamiento de la persona, que muestra qué tanto se endeudó con respecto a su capital o activos que posee, que mediante estos va creando mayores rendimientos.
Quizá te interese: Préstamos personales sin Buró
¿Qué es la deuda de subsistencia?
La deuda de subsistencia está relacionada con el apalancamiento elevado, con el objetivo de salir adelante con base en la deuda. Este término aplica cuando una persona se queda sin dinero y necesita pedir prestado para hacer frente a los gastos básicos diarios, como comida y transporte.
Formas de endeudamiento
En México, y en el mundo existen diferentes formas de endeudamiento, las cuales se dividen prácticamente en dos: productivo y de consumo.
El primer tipo, el productivo, se refiere a cuando una persona o empresa solicita un préstamo con el firme objetivo de invertirlo. En otras palabras, se está endeudando con el fin de poner a trabajar ese dinero y así, generar recursos para pagar y obtener una ganancia.
El segundo tipo, de consumo, se trata simple y sencillamente de un endeudamiento para la adquisición de algún bien, el cual no se logra comprar al contado. Este estilo de deuda no hará que generes una ganancia; sin embargo, muchas veces sí generará una sensación de satisfacción.
Ambos créditos son positivos siempre y cuando tengas claro desde un principio para que los quieres o necesitas, antes de solicitar alguna de los diferentes tipos de deudas que te compartimos es importante que lo planees y analices si cuentas con la estabilidad económica para lograr pagar.
¿Cómo evitar el endeudamiento?
Para no caer en un endeudamiento es importante contar con algunos hábitos financieros y llevar a cabo una serie de prácticas para liquidar en tiempo y forma, en Resuelve tu Deuda te compartimos algunos consejos que te ayudarán a no caer en alguna situación de este estilo:
- Realiza un presupuesto mensual, destina una cantidad a cada servicio o producto.
- Organiza tus finanzas, hoy en día existen muchas aplicaciones para evaluar tu comportamiento financiero.
- No solicites ningún préstamo o crédito para pagar deudas, mejor líquida poco a poco o recurre a una reparadora de crédito.
- Si ya tienes un problema de endeudamiento, busca a una reparadora de crédito como Resuelve tu Deuda.
Quizá te interese: Solicitar un préstamo urgente